La Terapia de Reiki a Distancia recibe el nombre de Enkaku Chiryo, se envía energía sanadora y amorosa hacia la persona, animal, planta, situación, que requiera elevar su estado vibracional, y que por enfermedades físicas, estados emocionales y/o sicológicos, haya visto disminuido su capacidad energética, con síntomas como estrés, cansancio, fatiga, ansiedad, insomnio, entre otros. El objetivo es promover la autorregulación del organismo, armonizando la salud.

Hon Sha Ze Sho Nen

Para enviar sanación a distancia, el reikista tiene que disponer del II Nivel de Reiki, cuando se aprende el símbolo Hon Sha Ze Sho Nen (su significado “sin pasado, sin presente sin futuro” y también “el Buda que hay en mí saluda al Buda que hay en ti, para promover la Iluminación”) Con este símbolo se apertura la sesión, y se utiliza como si se estuviera imponiendo las manos físicamente a la persona. Además de utilizar otros símbolos de Reiki.

Al enviar Reiki a distancia, no tan sólo hablamos para distancias físicas (cualquier lugar del mundo), sino también espacios temporales. Así se puede sanar el pasado, el presente e incluso proyectar energía positiva al futuro, o proyectos que se tienen pensados para que funcionen bien.

¿Cómo ocurre el proceso de Reiki a Distancia?

Para comprender cómo sucede el proceso de envío de energía, hay que tener presente en primer lugar, que somos seres energéticos, con un campo electromágnético que nos permite funcionar. Todos estamos unidos entre sí por energía inteligente. Estamos protegidos de un campo áurico, y funcionamos mediante la activación y equilibrio de centros de energía llamados chakras. Por diversos motivos (estrés, enfermedades, contaminación, energía tóxica, etc.) estos centros de energía se desequilibran. La energía curativa, sanadora, bien intencionada, de Reiki reactiva este equilibrio natural por derecho que tenemos cada ser humano, vibrando a través de pensamientos y emociones nutritivas. Eso es lo que activa Reiki.

¿Cómo es la sesión de Reiki a distancia?

La persona que recibe la terapia, tiene que estar en conocimiento que va recibir Reiki, para que sea bien recepcionada. En casos que la persona no esté en condiciones de salud de manifestar su aprobación, un familiar puede autorizarla su va en su beneficio.

Es ideal realizar la sesión cuando la persona está tranquila, en un lugar en silencio, preparada/o para la recepción. Idealmente colocar un vaso con agua cerca de la persona, aromatizar y colocar una música suave.

Cuando el terapeuta realiza la sesión a distancia realiza la misma intención, aplica los mismos conocimientos y utiliza su experiencia en beneficio del ser vivo al que dirige su trabajo. Cuando no podemos recibir una terapia físicamente, Reiki a distancia cumple el objetivo de contribuir al restablecimiento de la salud.